Desde que uno trabaja con personas, es cuando se abre uno de los canales de comunicación que es escuchar. Antes de irme de vacaciones, en la ultima semana sentía que no quería que ninguno de los usuarios que veía me hablara. Ninguna adolescente, ninguna mujer del abanico de edades que uno ve.

No quería escuchar sus problemas, estaba cansada. Pero de aquí que esta matrona estaba cansada, ¿porque?, me preguntaba una y otra vez, veía con desgano los problemas circulando en el box y lo único que quería era irme a mi casa y que nadie, absolutamente nadie me hablara, tirarme en sillón, prender y apagar la televisión. Sentía odio, sentía hastío, sentía tantas cosas negativas trepando por las paredes, una especie de fuerza arrebatadora mientras tomaba la presión y otra fuerza desvanecedora al pesar.

Hasta parecía que una malvada personalidad se iba a apoderar de mi. E iba a hackear Rayen (como si eso fuera posible, yo creo que si.)

Que extraño, recordé a los psicólogos, ¿que hacen cuando no quieren escuchar más?, yo no soy psicóloga pero aunque uno no lo quiera, te transformas en una confidente, cuando nadie mas escucha, tu eres ese hilo que se transforma en escalera de escapatoria.

Una parte de mi ser, hacia que la señora siguiera hablando, le decía lo que ella debía tener escondido en un lugar recóndito en su mente, que tenia que hablar. Yo escuchaba pacientemente mientras una de mis voces gritaba que parara, quería echarla y escuchar el bendito silencio, recostarme sobre el respaldo de la silla.

Después de recorrer caminos de sol y sal, en el hermoso norte, comprendí que este hastío tan grande que puede sentirse en el trabajo es por tu mismo deseo de hablar. Tiendo a adorar el silencio, pero hay veces que el silencio es roto por el brotar de tus sentires y es la maravillosa liberación de tu ser.

Y descubrí con ayuda que ese odioso deseo de no escuchar, es porque yo necesito hablar.

Si no puedo liberarme de mis demonios, no podre ayudar a otros a descubrir los suyos, y así otro ser me tendera su mano.

Porque con respuestas simples comprendí el porque de este sentir.

Y con el entendimiento del caos, esta matrona quiere volver a escuchar, y quiere hablar.