Educación sexual

La educación sexual se ha definido como la descripción de la educación acerca del sexo, la sexualidad, el aparato reproductor femenino y masculino, la orientación sexual, las relaciones sexuales, la planificación familiar y el uso de anticonceptivos, el sexo seguro, la reproducción -y más específicamente la reproducción humana-, los derechos sexuales y otros aspectos de la sexualidad humana con el objetivo de alcanzar una satisfactoria salud sexual. (Organización Mundial de la Salud (2006). Defining sexual health: report of a technical consultation on sexual health, 28–31 January 2002, Geneva. )

En nuestro país queda de manifiesto la gran falencia sobre este tema, no sólo porque nuestra sociedad lo consideró por muchos años un tabú, sino porque, en la actualidad aún cuesta conversar sobre ello abiertamente.
En nuestra sociedad se llama de muchas maneras un organo sexual como lo es el pene: pilín, piletitita, pico etc etc. y que la mayoría lo encuentra gracioso, sin embargo no conocen la anatomía, y el desarrollo de este y lo más importante: las infecciones que se puedes causar si no se usa preservativo (Como diría una profesora de mi ramo de educación sexual: “siempre condón”).

Algunos consideran ofensivo que nosotros los estudiantes del área de salud  futuros matrones, vayamos a los colegios a realizar educación sexual a sus hijos, sin embargo, ¿no les debería dar más vergüenza que los jóvenes y los adolescentes no sepan sobre su sexualidad?, no les parece vergonzoso negarles las herramientas para prevenir un embarazo adolescente y las enfermedades de transmisión sexual y sobre todo, poder desarrollar una sexualidad completa e integral y evitar tantas mujeres que no logran un orgasmo y sentirse bien en su sexualidad, u hombres con otros problemas sexuales.

¿Porque ese afán de negar nuestra sexualidad en la sociedad?, somos seres sexuados, nacimos así y moriremos así. La Declaración de los Derechos Sexuales Promulgada en el Congreso Mundial de Sexologìa. Valencia, España (1997), lo dice: “La sexualidad es una parte integral de la personalidad de todo ser humano. Su desarrollo pleno depende de la satisfacción de necesidades humanas básicas como el deseo de contacto, intimidad, expresión emocional, placer, ternura y amor. La sexualidad se construye a través de la interacción entre el individuo y las estructuras sociales. El desarrollo pleno de la sexualidad es esencial para el bienestar individual, interpersonal y social.”

Desde mi corta experiencia puedo hablar. He ido a realizar educacion sexual a un tercero medio, séptimo (sólo niñas) y sexto básico (mixto).

En comparación el séptimo tenía mayores falencias que el sexto, referentes a conocimientos de su propia anatomía, del aparato reproductor femenino en especial las niñas no sabían que se menstrua por una parte diferente a por donde se hace pipi.
Parto desde esa base y la pregunta que muchas veces sale a la luz.

¿Quién debe hacer educación sexual?: ¿los padres?,¿los profesores?,¿matrones?,  ¿la televisión?,¿internet?.

¿Qué sucede con los padres que no aclaran las dudas a sus hijos?.

Es por eso que debemos entablar comunicacion con los hijos, y si nosotros tenemos dudas…como adultos. nunca es tarde para aprender. Nuestro alrededor esta lleno de mensajes llenos de sexo y al estar bombardeados por estos mensajes desde pequeños, es necesario una guía para saber distinguir y desarrollarnos integralmente nuestra sexualidad, con libertad, sin morbo ni malicia.

Menciono:

Los derechos sexuales son derechos humanos fundamentales y universales.
La salud sexual es el resultado de un ambiente que reconoce, respeta y ejerce estos derechos sexuales:

1. El derecho a la libertad sexual.
2. El derecho a la autonimía, integridad y seguridad sexuales del cuerpo.
3. El derecho a la privacidad sexual.
4. El derecho a la equidad sexual.
5. El derecho al placer sexual.
6. El derecho a la expresión sexual emocional.
7. El derecho a la libre asociación sexual.
8. El derecho a la toma de decisiones reproductivas, libres y responsables.
9. El derecho a información basada en el conocimiento científico.
10. El derecho a la educación sexual integral.
11. El derecho al atención de la salud sexual.

No sólo hay que cumplir con las reglas y los impuestos, sino que, exiguir nuestro derecho a una sexualidad plena.

La verdadera sexualidad no es el simple acercamiento de los sexos, sino el trabajo creador del hombre y la maternidad de la mujer.

Gregorio Marañón